publicidad

Matar las tardes



 


 
Esta no es la embajada del reproche
ni el vademécum de lo que perdí,
para que llueva, para ser de noche,
es condición cine qua non to be
or not to be , como intuyó el bolero
calavera de un príncipe danés,
se equivoca la urgencia y el te quiero
que no vuelve la urgencia del revés.

Escribo sólo para matar las tardes,
por no ponerme a deshacer maletas,
por no arrastrarme por las estaciones,
por no andar, como el rey de los cobardes,
mustio, como un ramito de violetas,
en el sepelio de las decepciones.


@Joaquín Sabina


No hay comentarios: